La Capacitación siempre ha sido un gran reto para los pequeños y medianos empresarios, pues puede representar una gran salida de dinero y no siempre lograr los resultados deseados, e incluso puede volverse una gran carga administrativa y de operación.
Pero, ¿realmente es necesario invertir en la formación de todo nuestro personal?, la respuesta es muy sencilla… Sí, para mantener un nivel competitivo y alinear los esfuerzos de nuestra empresa. Se ha expresado múltiples veces que en estos tiempos lo único constante es el cambio, entonces cómo podemos responder de manera efectiva a esos cambios si no actualizamos a quienes colaboran con nosotros para que desarrollen sus habilidades de la mejor manera.
Capacitación Estratégica
El gran problema de la capacitación es cuando se invierte sin un plan o estrategia enfocada a la misión y objetivos de la empresa, atendiendo únicamente a la percepción de quien decide la formación institucional, por lo que es muy importante dedicarle el tiempo necesario para desarrollar todo el plan. Los pasos básicos son:
1) Detección de Necesidades de Capacitación
2) Elaboración del Plan o Modelo de Capacitación
3) Implementación de la Capacitación
4) Evaluación del proceso formativo
5) Análisis del Impacto en la productividad (ROI)
6) Realizar los ajustes necesarios
Formación Integral
La actualización técnica y profesional son rubros muy importantes para que los colaboradores puedan enfrentar de mejor manera su día a día y así conseguir mejores resultados, pero no debemos de olvidar que trabajamos con seres humanos y temas como integración, trabajo en equipo, formación física, social y espiritual, son dimensiones necesarias para su desarrollo integral, fortaleciendo así su sentido de identidad y compromiso con la institución.
Obligación
Aunque para algunas empresas la capacitación pareciera un lujo que no pueden ofrecer, cada vez existen más opciones para disminuir los costos de inversión a través de capacitadores internos, la educación a distancia y una gran gama de proveedores debidamente registrados como las propias Universidades que pueden establecer programas a la medida de las PyMEs.
Y aunque siempre ha sido una obligación capacitar a los colaboradores, en las reformas realizadas a la Ley Federal del Trabajo en el 2012, se incrementaron las obligaciones legales por parte de los patrones en este tema, así como las posibles multas por cada uno de los trabajadores que no hayan sido parte de estos procesos formativos, por lo que es muy recomendable seguir todo el registro y ordenamientos que se dicta en la Ley y que está disponible en la página: www.stps.gob.mx.
Mtro. Enrique Ramírez Torres
Subdirector de Capital Humano / Universidad La Salle
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