No pretenden ser una red social, tampoco una red de contactos. Su apuesta principal es ser la plataforma virtual líder en Latinoamérica y España en donde el común será el lenguaje. El español. Idioma que también deberán compartir aquellas personas que quieran participar con sus conocimientos, experiencias, ideas y aporten al mejoramiento, principalmente, de las empresas. Todos ellos serán los socios que formen Elite Bussiness Club. Dicho club tiene una serie de requisitos con altos estándares de exigencia. Y no necesariamente está basado en el poder adquisitivo. Aunque, desde luego es parte.
Fernando Mateo quien es CEO del club de negocios señala que el concepto surge de una simple sala de lectura inglesa donde se compartían en el siglo XIX, conversaciones. Eran espacios físicos. Era una comunidad de experiencias, de mejores prácticas –comenta, mientras se entusiasma y dice: “Esto lo estamos llevando al siglo XXI. Lógicamente con avances tecnológicos enormes con respecto a lo que era el siglo XIX. La aparición de las redes ha modificado completamente el concepto de cómo se establecen las relaciones empresariales”.
La conectividad es –dice- “la palabra que ha estado desde el primer día del club. Yo creo es lo que define el futuro de cualquier plataforma. Es lo que más valor aporta, poder tener contacto con una persona para darte una solución una respuesta o compartir contigo una oportunidad de negocio. Estamos llevando a un espacio virtual, completamente seguro, completamente filtrado desde el punto de vista de quién se integra como socio. Sin olvidar el aspecto presencial”.
“Elite Bussiness Club es un foro donde 24 horas al día nuestros socios pueden plantear cualquier cuestión, cualquier opinión, cualquier comentario, exponiendo oportunidades de negocio o solicitando, recabando apoyo o ayuda de los otros socios para solventar alguna duda que en ese momento esté afectando a su lado profesional o gerencial”.
El CEO explica que hay temas como la transición generacional que preocupa muchísimo. Apunta que en los foros que se han abierto, este tipo de temas se están discutiendo. Comenta que han abordado también rubros como la energía ya que “son preponderantes en México” y que hay preocupación en el sentido de buscar soluciones o alternativas a la situación actual de los precios del petróleo.
A la pregunta a cerca de la seguridad que ofrece el club, responde que el proceso se inicia con un “filtro de inteligencia empresarial” que verifica la “identidad de los socios para asegurar quienes dicen ser, o los puestos que dicen desempeñar”. Fernando nos comenta que la plataforma cuenta con protocolos norteamericanos para evitar intromisiones.
Mateo asegura que existen varios pasos para llegar a ser socio del club virtual privado. Aclara que uno de ellos es la proactividad de los socios y que el principal añadido es la inteligencia y experiencias de los mismos.
En entrevista telefónica, Fernando nos platica que en los tres meses que llevan operando están ofreciendo una serie de principios notables. Tales como acceso a la principal biblioteca digital empresarial a nivel mundial, lo que supone un ahorro en seminarios y libros. También habla de un buscador de contactos con perfiles completos y detallados.
El ejecutivo dice que la pertenencia al club brinda apoyo a los empresarios cuando viajan, facilitándoles una agenda de contactos para que se encuentren con “iguales o contrapartidas en la industria” en el país a donde viajen.
“Lo que buscamos es proactividad, buscamos gente, socios, profesionales, miembros de la academia que quieran aportar, que quieran compartir y que quieran experimentar. O bien empresarios profesionales que tengan una serie de necesidades que crean, puedan ver satisfechas por su participación en el club”.
Respecto de cuánto cuesta pertenecer al club privado la respuesta fue que los socios son de tipo capitalistas con un pago anual de mil dólares. Fernando Mateu considera que “es un valor simbólico comparado con el valor añadido que puede beneficiar a un socio”.
Elite Business Club actualmente cuenta con aproximadamente 250 socios y de acuerdo con Mateu pretenden llegar a los quinientos a finales de este año. Incluso un 5 por ciento saldrá del entramado profesional y empresarial mexicano, asegura. Su siguiente parada es Brasil ya que “su ubicación geográfica le hace un socio muy poderoso”. Tenemos también interés por parte de los empresarios de origen hispano que operan en Los Ángeles California, Texas y Florida. El club, según su CEO, apuestan por la exclusividad y por hacer un espacio entre iguales. Y no pretenden ser una red social porque velan por la intimidad y la privacidad.
Fernando Mateo quien dice ser los oídos del club, y el traductor de las necesidades de los socios nos platica que en un futuro no descartan establecerse en una de los principales mercados como lo es México.
Norma Mtz. Cruz
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