El futuro de la gestión del almacenamiento: cuando las cosas se vuelven complejas, lo inteligente habilita el autoservicio

La gestión del almacenamiento está evolucionando rápidamente. Impulsados por la IA y la transformación digital, los centros de datos deben hacer frente a un crecimiento masivo de datos, requisitos de agilidad de las aplicaciones sin precedentes, una complejidad vertiginosa, además de la escasez de habilidades y los crecientes costos de energía.

No se trata tanto de un cambio radical como de una tormenta perfecta. Pero eso trae oportunidades de mejora. Las organizaciones pueden modernizar su infraestructura y operaciones de TI para aprovechar una nueva era en la gestión del almacenamiento basada en políticas, aprovisionamiento de autoservicio y enfoques automatizados de almacenamiento como código.

Es importante profundizar en los desafíos de la gestión del almacenamiento en el camino hacia la transformación digital y las soluciones de vanguardia que pueden aportar grandes ventajas a las organizaciones que las implementan.

El desafío de los datos

De los fundamentos que impactan la gestión del almacenamiento, nuestra relación con los datos es crucial. Desde 2010, la tasa media anual de crecimiento de datos ha sido de alrededor del 38%, según Statista. Eso incluye algunos años pico – como durante la pandemia – cuando la creación de datos se disparó, con un volumen total previsto de 181 zettabytes a nivel mundial para 2025. Una cantidad asombrosa, sin signos de desaceleración. El almacenamiento implementado ha seguido un aumento en el volumen de datos, con 6,7 zettabytes instalados en 2020 (teniendo en cuenta que muchos de los datos creados no se retienen) y se prevé una tasa de crecimiento anual del 19% hasta 2025.

La planificación para tales tasas de crecimiento de datos es un dolor de cabeza para las empresas, especialmente con el ciclo tradicional de inversión y depreciación. En el pasado, poder adaptarse a requisitos no planificados significaba deber tener hardware adicional en reserva.

Al mismo tiempo, los crecientes costos de la electricidad han impulsado la necesidad de un mejor uso de la energía en el centro de datos. Las organizaciones de TI ahora también deben centrarse en la eficiencia y la sostenibilidad de su infraestructura.

El acto de aprovisionar almacenamiento también fue un proceso que requirió tiempo (y personal), particularmente en organizaciones segmentadas verticalmente entre departamentos comerciales y subunidades de software, servidores, almacenamiento y redes de TI. Las solicitudes para implementar y aprovisionar almacenamiento requerían una ruta tortuosa desde las unidades solicitantes hasta los administradores de almacenamiento. A menudo, la organización necesitaba muchos administradores con múltiples habilidades para gestionar numerosos entornos de almacenamiento en varios proveedores y tecnologías de almacenamiento. Todo esto fácilmente podría llevar semanas.

Cuando las cosas se vuelven complejas…

Lidiar con el crecimiento de los datos y la mayor complejidad de las aplicaciones anteriormente significaba dedicar recursos adicionales al problema en forma de administradores de almacenamiento adicionales. Sin embargo, simplemente aumentar la plantilla de administradores de almacenamiento no sólo es ineficiente, sino prácticamente imposible en el panorama de TI actual.

Las habilidades para administrar múltiples arreglos de almacenamiento heredados a menudo no existen o su contratación es muy costosa. No sólo esto, sino que las organizaciones modernas quieren que sus empleados se centren en la innovación, el aumento de la productividad y la experiencia del cliente, en lugar de las tareas de aprovisionamiento del día a día.

Hoy en día, los enfoques de gestión del almacenamiento que requieren mucha mano de obra ya no tienen sentido. El viejo paradigma de gestión de TI segmentado verticalmente se ha derretido ante las nuevas arquitecturas de TI. Estamos en transición (a través de la transformación digital) hacia nuevas normas que incluyen modelos operativos en la nube e infraestructura como código con almacenamiento especificado como parte del proceso de desarrollo e implementación de aplicaciones.

La agilidad y la velocidad de entrega son ahora más importantes que nunca y se espera que las organizaciones puedan adaptarse rápidamente a los nuevos requisitos.

…el autoservicio inteligente habilitado

Cuando se emplean recursos de almacenamiento dedicados, las organizaciones desean aumentar significativamente el volumen de almacenamiento administrado por FTE. Pero, algo crucial para los nuevos paradigmas, gran parte del aprovisionamiento de almacenamiento pasa a las fases de desarrollo de la implementación de aplicaciones, activables mediante la selección de autoservicio de perfiles de rendimiento de almacenamiento o codificados a través de API.

Con los nuevos modelos de implementación de aplicaciones, como la contenedorización, los recursos de almacenamiento se definen como parte del archivo de configuración de la aplicación, diseñado para ser implementado automáticamente por la plataforma de orquestación.

Aquí, las aplicaciones giran y escalan rápidamente con requisitos de almacenamiento integrados en esos ciclos de vida, y a un ritmo que a menudo va más allá de lo que los humanos pueden administrar manualmente. A tal velocidad de operaciones, la gestión del almacenamiento tiene que funcionar mediante políticas preestablecidas, aprovisionamiento automático y escalado automático.

Gestión del almacenamiento en la era de la transformación digital

El futuro de la gestión del almacenamiento se centra en perfiles de rendimiento de almacenamiento establecidos por el cliente, seleccionados mediante autoservicio o completamente automatizados en el entorno de aplicaciones mediante almacenamiento como código y orquestadores.

Las organizaciones de TI inteligentes transformarán el rol del administrador de almacenamiento para que parezca un gerente de producto. Esto significa definir “productos” de almacenamiento a través de conceptos abstractos como clases y políticas de almacenamiento.

Esto también significa permitir el autoservicio por parte de los clientes internos y las plataformas de orquestación de las organizaciones en lugar de ser la persona que aprovisiona los objetos de almacenamiento, dejando al nuevo gerente de productos de almacenamiento libre para administrar flotas de dispositivos en lugar de matrices de almacenamiento individuales, monitorear el uso de los sistemas existentes servicios y crear nuevas ofertas.

Para habilitar este modelo operativo en la nube, algunos proveedores de almacenamiento pueden ofrecer plataformas con las que los administradores de almacenamiento pueden administrar y agregar capacidad a su flota de dispositivos de almacenamiento de manera no disruptiva, así como definir clases de almacenamiento, políticas y zonas de disponibilidad que estarán disponibles para sus clientes. consumidores.

Mientras tanto, los desarrolladores que utilizan plataformas de infraestructura como código pueden especificar la clase de almacenamiento que desean para una aplicación, codificarla en plantillas, probarla e implementarla.

Para entornos en contenedores totalmente automatizados, las empresas deben buscar la plataforma de datos Kubernetes de nivel empresarial líder para aplicaciones modernas. Esto proporcionará gestión de almacenamiento para clústeres de Kubernetes con implementación automatizada y escalamiento de almacenamiento persistente, además de protección de datos.

Algunas soluciones incluso incluyen servicios de datos además de esto, como un conjunto seleccionado de bases de datos para usar en entornos Kubernetes, que se implementan con solo hacer clic en un botón, lo que ahorra una gran cantidad de tiempo a los desarrolladores.

Sin embargo, tenga en cuenta que permitir el autoservicio sin dejar de depender de largos ciclos de compra y entrega deja a la organización expuesta a riesgos. Adoptar plenamente estos conceptos significa consumir las plataformas de almacenamiento subyacentes como servicio, para permitir una escala rápida donde sea necesario, permitir flexibilidad, pero también evitar invertir en hardware antes de que sea realmente necesario.

Las empresas deberían fijarse no sólo en la tecnología de los proveedores, sino también en su capacidad para ofrecer sus plataformas a través de modelos de consumo flexibles y bajo demanda.

¿Cómo se puede lograr una gestión del almacenamiento moderna y fluida?

De hecho, algunos proveedores de almacenamiento pueden ofrecer todo lo anterior; la ventaja de trabajar con un único proveedor de almacenamiento es que los conjuntos de productos integrados crean eficiencias en toda la pila.

Todos los arreglos de almacenamiento flash vinculados a través de un único entorno operativo significa que las cargas de trabajo se pueden administrar a escala en toda la empresa desde una sola vista, sin problemas junto con una plataforma de datos Kubernetes y toda la funcionalidad de almacenamiento de autoservicio que una empresa moderna necesita.

También existen enormes beneficios en la utilización y la eficiencia energética. Algunos proveedores de tecnología totalmente flash pueden ofrecer hasta un 85 % más de eficiencia energética en comparación con los productos totalmente flash de la competencia, y un espacio mucho más pequeño para maximizar la eficiencia del centro de datos.

Finalmente, trabajar con un proveedor que pueda ofrecer todo esto a través de una oferta de almacenamiento como servicio flexible y respaldada por SLA que ofrezca garantías en torno al uso de energía, cero migraciones de datos y actualizaciones no disruptivas es la clave para lograr una gestión del almacenamiento moderna y sin interrupciones.

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Por Douglas Wallace, Gerente de Ventas de Distrito, América Latina y el Caribe (Excepto Brasil) en Pure Storage

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