La Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC) realizó un sondeo de mercado en los 32 Estados de la República para establecer el precio de los 24 productos de la canasta PACIC II en cada una de las entidades, encontrado que a mes y medio de haber sido puesta en marcha la estrategia de combate a la carestía PACIC II, lanzada el 3 de octubre de este año, en ningún Estado ha logrado su cometido de ofertar este grupo de alimentos esenciales a un costo por debajo de los $1,038 pesos-
Ante este hecho, la ANPEC confirma que la inflación golpea parejo en todo el territorio nacional. Esta inmersión de mercado es clave al establecer la sensación térmica previa a los gastos decembrinos de fin de año, donde dos cosas fundamentales ocurren: por una parte, se consume más de lo que se tiene con base a endeudamiento cuyo puerto final es la morosidad de pago, al mismo tiempo que las principales cadenas productivas actualizan sus precios para arrancar el año venidero, con incrementos que, adicionales a los que ya padecemos por la inflación, la “cuesta de enero”, a últimas fechas convertida en una verdadera pendiente de largo aliento.
Lo que se ha afectado es el poder adquisitivo de la gente. Una amplia base de la pirámide de la sociedad mexicana está batallando para poder sacar adelante su cotidianidad y la alimentación. La inflación alimentaria es la factura dolorosa de la postpandemia porque se ha incrementado es el costo de los alimentos y los servicios básicos.
“Las familias se están resintiendo porque sus ingresos no se han incrementado en la misma proporción en los aumentos por lo que han restringido su dieta, ha habido cambios de hábitos nuevos que tiene que ver con calidad y cantidad de alimentos. En calidad de alimentos, la gente canceló las proteínas, lácteos, embutidos, también ha abandonado el área de antojos, los sectores de la población comenzaron a compran alimentos para corto plazo y el consumo es más restringido para tener un control en el hogar”, comentó Cuauhtémoc Rivera, presidente de ANPEC.
“Este consumo restringido, el ticket del pequeño comerciante ha bajado y quienes viven de este negocio ha tenido que incrementar su carga de negocio, hay quienes trabajan entre 14 y 16 horas diarias para mantener el punto de equilibrio, se abre de lunes a domingo por la lucha por no cerrar el negocio, mantener la fuente de ingresos para lo esencial”, agregó Rivera.
Cuauhtémoc Rivera consideró que el panorama para el 2023 indica que la población tiene que estar más atentos al consumo, compras, tener una mejor administración en los recursos de los hogares.
Planes para el 2023
La ANPEC tiene pensado desarrollar su fuerza regional, una amplificación territorial. “Queremos tener claridad en la problemática del sector desde las condiciones más locales hasta las generales, tener una narrativa lo menos sesgada y que trate con esa comunicación amplificada en la mediática del online y offline con la social media de manera coordinada y coherentemente”, dijo Rivera.
Finalmente, Rivera concluyó: “Lo que queremos es fortalecer nuestra representatividad, es el esfuerzo mayor para el otro año. Estamos esperanzados a que se convoquen nuevas pláticas, estamos a punto de hacerlo y evitar el desgaste sin ir a un decreto.”
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